lunes, 13 de junio de 2011

Hiroshi 1 Lucrecia 0



Un cachorro de labrador de 45 días se comporta casi como un bebé, duerme 2 ó 3 horas pero a diferencia del cachorro humano, el de perro no come… solo JUEGA, CORRE Y SALTA un rato hasta volver a dormirse.

Las primeras interrelaciones entre Hiro y Lulú fueron normales, se olieron, se investigaron… se separaron…
Un día después a Lulú le pareció poco entonces decidió probar suerte con sus dientes afilados sobre la nariz investigante de Hiro… ahí fue cuando recibió su primer bofetada ^^

Se comportó como un buen hermano mayor ya que jamás sacó a la luz, ni rumbo al hocico de la mocosa malcriada, sus uñas afiladas, solo la corrió levemente con un golpe seco de su pata acolchadita y suave… La reacción de la muy cobarde fue salir llorando y corriendo hasta los tobillos de su padre humano mientras temblaba cual gacela atacada por perros salvajes, sin tener en cuenta que por ahora la única salvaje es ella en nuestro descontrolado hogar.

Luego de semejante reacción, el adulto gato se desparramó en el pasillo impidiendo que la invasora pasara rumbo a las habitaciones y baños, dejando claro que su habitat estaba limitado a lavadero, cocina, living comedor… ¿cuánto durará?

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